RESPALDO GLOBAL A CLAUDIA SHEINBAUM: ENTRE LAS LÍDERES MEJOR EVALUADAS DEL MUNDO
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Claudia Sheinbaum: un capital político que se confirma en las calles y en las encuestas

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OPINIÓN | Revista el Tlacuilo / 2025-12-08

Redacción. - La presidenta Claudia Sheinbaum no solo gobierna un país políticamente intenso y socialmente diverso; también encabeza una de las curvas de aprobación más altas entre mandatarios del mundo. Las mediciones internacionales más recientes la ubican dentro del top de líderes globales con mayor respaldo ciudadano, compartiendo espacio con figuras como Narendra Modi o Javier Milei, una rareza en un contexto internacional donde la mayoría de los jefes de Estado lidian con cifras modestas o planas.

De acuerdo con los distintos observatorios de opinión pública, Sheinbaum ha mantenido niveles que oscilan entre 60 y 70 por ciento de aprobación durante buena parte del año, incluso alcanzando picos superiores en momentos clave. Aunque la metodología de cada medición varía (algunas incluyen indecisos y otras no), el punto en común es claro: México tiene en este momento a una de las mandatarias con mayor legitimidad popular en el planeta.

Pero más allá de las encuestas, la evidencia empírica más contundente se vio hace unos días en la Ciudad de México, durante el acto masivo convocado por la propia presidenta. Desde nuestra perspectiva como observador, editor y cronista, el evento fue una radiografía perfecta del fenómeno político que Sheinbaum está encarnando: decenas de miles de personas abarrotando el Zócalo capitalino, no en un ambiente de crisis ni protesta, sino en un ejercicio de acompañamiento político poco común en el segundo año de una administración federal.

El Zócalo —tradicional termómetro del pulso nacional— lució más como cierre de campaña que como acto de gobierno. Familias completas, sindicatos, estudiantes, grupos de apoyo y curiosos se mezclaron en una jornada que, al margen de simpatías o filias, confirmó un dato fundamental: Sheinbaum no solo conserva su base social, sino que la moviliza. Y en política, movilizar vale tanto o más que medir.

Comparado con otros mandatarios del mundo, el contraste es aún más evidente. En países europeos, la aprobación presidencial suele navegar entre 25 y 40 por ciento. En Estados Unidos, la figura presidencial vive una polarización crónica que impide saltar de la mitad del país. Incluso en economías estables de Asia o Sudamérica, consolidar mayorías permanentes sería casi un acto de magia. En ese panorama, lo de Sheinbaum parece más bien una anomalía estadística sostenida: mucha aprobación, poca erosión y, como quedó claro en la capital, músculo territorial.

Sin embargo, el reto inmediato para su gobierno no está en llenar plazas ni encabezar rankings, sino en convertir ese respaldo social en resultados tangibles: seguridad, bienestar económico, infraestructura, educación; de ahí es que toma relevancia la presencia en el acto de gobernadoras, gobernadores, sus Gabinetes, delegados federales y funcionarios en general; que son quienes tendrán que apuntalar con hechos lo expresado por la Presidenta este día sábado.