No fueron sus enemigos políticos ni los “Guacamayos” los que dieron a conocer un video pornográfico de la diputada federal por Morena, trans, María Clemente García; fue ella misma quién lo “colgó” en sus redes sociales, sin calcular quizás que a un gran sector social escandalizaría esa acción y ese contenido; ante la rebambaramba que se generó la diputada se “defendió” argumentando que filmar videos de sexo explicitó ha sido su profesión, y comparó su decisión de continuarlo haciendo siendo diputada con la de sus homólogos que no dejan sus profesiones al tomar una curul.

“Si ellos pueden trabajar en sus oficios y profesiones, lo siento, mi oficio es ser puta y tengo derecho a ser puta.

“Es pornografía, no puede ser tomado, es pornografía. Yo produzco pornografía, me pagan por hacer pornografía; por eso lo hago, porque me pagan”, comentó.

Señaló que cuando los diputados renuncien a sus trabajos, ella lo hará.

“Es que siempre me he dedicado a esto. Los demás diputados son administradores, tienen empresas. Patricia Arizmendi, ¿por qué no renuncia al consejo de administración de sus empresas? ¿A ella tampoco le alcanza? ¿Por qué sigue trabajando?

“En el PAN, ¿cuántos abogados hay? Siguen despachando en sus despachos; siguen yendo a sus ranchos los que son campesinos. ¿Yo por qué no voy a seguir trabajando? Cuando ellos dejen de producir dinero en otro lado, yo haré lo mismo”, dijo.

¡Ah caray! Sin duda son declaraciones para personas de mentalidad abierta; mientras tanto Morena Veracruz ha puesto el dedo en la llaga señalando que serán más selectivos con quienes se arriman a ese partido político, hoy en la cúspide del poder. Claro hablan de temas políticos, pero quizás abarquen estos otros, para ser pioneros como en otros casos, de lo que sucede dentro de Morena a nivel nacional.