EL COLOR DE LOS 200 AÑOS DE LA CONSTITUCIÓN Y LA ARMADA DE MÉXICO
Estado de Veracruz : UNA CELEBRACIÓN QUE REBOSA HISTORIA Y HONOR / Gamaliel Velazco
UNA CELEBRACIÓN QUE REBOSA HISTORIA Y HONOR

Gamaliel Velazco
/ 2024-10-04

EL COLOR LOS 200 AÑOS DE LA CONSTITUCIÓN Y LA ARMADA DE MÉXICO: UNA CELEBRACIÓN QUE REBOSA HISTORIA Y HONOR

Revista el Tlacuilo | Gamaliel Velazco.- El viento del puerto se convirtió en un silencioso testigo de uno de los eventos más significativos para México y, en particular, para Veracruz. En las cálidas tierras del estado, la primera presidenta del país fue recibida con la hospitalidad veracruzana, esa misma que resuena con fuerza en cada rincón y que siempre ha distinguido a su gente. Acompañada de altos mandos de la Marina, autoridades militares, el gobernador y la gobernadora electa, la presidenta encabezó una celebración histórica: los 200 años de la Constitución de 1824 y la creación de la Armada de México.

El discurso de la mandataria no fue solo una formalidad, sino una verdadera cátedra de historia. Con una oratoria precisa, destacó la relevancia de la Constitución y la Armada en el desarrollo del país. Hizo una mención especial a Veracruz, recordando su inquebrantable vínculo con la historia nacional. "El veracruzano sabe luchar, sabe querer, y lo hace con una devoción particular hacia su tierra", señaló en un gesto que resonó entre los asistentes.

El desfile naval que siguió al discurso fue un espectáculo de solemnidad y orgullo. Elementos de la Marina, con estandartes en alto y uniformes impecables, desfilaron ante el público, demostrando honor y gallardía. En números, la participación incluyó 34 banderas de guerra, 6 estandartes, 47 guiones y 2,816 efectivos, de los cuales 754 eran mujeres. Además, 10 embarcaciones, 10 aeronaves y 47 vehículos operativos formaron parte del despliegue, junto a 14 perros de servicio y un autobús turístico que transportaba a 30 niños y sus tutores, quienes se robaron las sonrisas de los presentes.

La tarde se cerró con un ocaso que pareció hecho a medida para el evento. El desfile, con unidades históricas al frente, banderas que ondeaban al compás del viento y fuerzas especiales que marchaban con precisión, culminó con la aparición de pequeños marinos a bordo del autobús, su papel representado con la seriedad y el entusiasmo propios de su corta edad.

Para Veracruz, esta visita fue un recordatorio del peso de su historia y de la cercanía del gobierno federal con sus ciudadanos. La conmemoración no solo honró una fecha trascendental, sino que reafirmó el compromiso con el estado y su gente.

Un evento que, sin duda, quedará grabado en la memoria colectiva del país.