En nuestro país la escultura es una de las artes más antiguas y emblemáticas, desde el México prehispánico en pequeña y gran escala. Más allá de los objetos comunales muchas esculturas han sido destacadas por su monumentalidad. En tiempos actuales la escultura en México sigue levantando la mano, uno de sus mayores representantes es Enrique Carbajal, más conocido como Sebastián.

Nacido el 16 de noviembre de 1947 en Chihuahua, es considerado en este momento el escultor contemporáneo de más presencia internacional. Un lenguaje escultórico propio iniciado en los años sesentas empezó a destacar por su lenguaje escultórico propio, las características constructivas de sus obras y un excelente uso de color.
En su carrera ha presentado cerca de doscientas exposiciones individuales en distintas ciudades del mundo, tanto de pequeño y mediano formato como importantes exhibiciones urbanas de grandes dimensiones. Ha recibido un número importante de premios y reconocimientos a su trayectoria.
Una de sus obras más conocidas en México es la escultura monumental, Cabeza de Caballo, conocida como El Caballito de Sebastián, ubicada en el Paseo de la Reforma.

En la capital veracruzana se inauguró en el 2008 una de sus obras monumentales titulada “Araucaria”, obra que se ha convertido para algunos en un símbolo de la ciudad, pero para un servidor es realmente un símbolo de una obra de infraestructura vial que guarda en la memoria una triste devastación de árboles de araucaria reales y de la falta de empatía por el medio ambiente.