24 de marzo, 2023. Papantla Veracruz (Revista el Tlacuilo) .- Este domingo es el último día de actividades de Cumbre 2024, una Cumbre destinada a rebasar los records de asistentes.

Cumbre Tajín ha evolucionado desde su surgimiento hace veinticuatro años; sus visitantes han ido moldeando su esencia; la dinámica de los tiempos ha ido poniendo en un mismo espacio la cultura ancestral con la moderna; en lo gastronómico se fusiona la cocina tradicional con la comida rápida; pero también sucede con las expresiones culturales, pues mientras en un escenario se presenta un rapero, en otros espacios se dan charlas de la tradición de los Voladores, o se lleva a cabo el taller de la danza de los negritos; mientras que al mismo tiempo, por los pasillos, un chamán purificaba con incienso a un visitante.

Los artesanos de diversos puntos del estado muestran con orgullo sus trabajos, que en varios casos rebasan el estándar de artesanía y son verdaderas obras de arte, van mucho más allá del valor comercial con que ellos los tazan, que es muy bajo; son piezas que si no fuera por la modestia de nuestros artesanos podrían subastarse en cualquier casa de arte a precios mucho más elevados; pero los maestros de la palma, de la madera, del barro y del bordado se dan cita para mostrar su arte con orgullo, explican cómo elaboraron sus piezas, cada una de ellas lleva horas de intensa relación con la cultura que les antecede; esa labor está más allá de un stand comercial, ellos y ellas son verdaderos maestros de su cultura que comparten a los visitantes con la alegría que distingue al pueblo veracruzano.

Tajín abre los sentidos, está lleno de sabores para el paladar; de música cantos y sabios consejos para los oídos; de olor a incienso, a copal y a sazones de comida tradicional que regocijan nuestro olfato; se desborda de una policromía extraordinaria; máscaras, atuendos, color y tradición llenan nuestros ojos ¡Tajín es una fiesta para los sentidos!

Platicar la experiencia de asistir a la Cumbre Tajín seguramente no nos dará la descripción plena de lo que sucede en el parque temático Takil-Sukut; solamente al vivirlo se puede entender; es el lugar en donde los ancianos totonacas imponen respeto con su presencia y el respaldo de sus tradiciones; es a donde se llena el alma al ver niños y las niñas practicando sus danzas tradicionales, mostrando a los visitantes su cultura, de igual a igual con los adultos, con orgullo y entusiasmo, con la seguridad de quién está seguro de que está en el camino adecuado.

Las mujeres totonacas, lucen sus atuendos bordados, aconsejan a las jóvenes, ríen mientras en sus comales rinden culto a la masa y a los elementos tradicionales de su cocina, que ponen después en un plato de barro, seguras de que se trata de una ambrosía.

Cumbre Tajín no ha perdido su esencia tras más de dos décadas, los visitantes saben que todo el evento gira en torno de la cultura totonaca, admiran la generosidad de quienes los bendicen, de quienes los curan y los sanan con sus costumbres ancestrales.

Tajín es único ya que se amalgama la diversión y el misticismo, además de que ninguno de ambos opaca al otro.
Este domingo concluye Cumbre Tajín 2024, si puede ir vaya, no va a encontrar ningún evento similar en México ni en el mundo; y si no le es posible asistir, nos vemos el año entrante.