El trabajo de Desiderio Hernández Xochitiotzin, el último gran muralista mexicano, llega al Complejo Cultural Los Pinos
Ciudad de México.: El trabajo de Desiderio Hernández Xochitiotzin, el último gran muralista mexicano, llega al Complejo Cultural Los Pinos / Gamaliel Velazco
En el marco de los 100 años del muralismo y de los 100 años del natalicio de Desiderio Hernández Xochitiotzin

Gamaliel Velazco
Ciudad de México. / 2022-09-14

En el marco de los 100 años del muralismo y de los 100 años del natalicio de Desiderio Hernández Xochitiotzin, se inauguró en el Complejo Cultural Los Pinos la exposición “D. H. Xochitiotzin. A 100 años del Muralismo”, conformada por más de 98 obras y cuatro reproducciones de algunos murales que el artista plástico realizó en el Palacio de Gobierno de Tlaxcala.

La muestra es un homenaje a la obra del artista nacido en Tlacatecpac, Tlaxcala, en 1922, y es una colaboración entre la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Complejo Cultural Los Pinos, de los gobiernos de los estados de Puebla y Tlaxcala, a través de sus respectivas secretarías de Cultura, y la Fundación Desiderio Hernández Xochitiotzin.

Durante la inauguración, realizada la tarde de este miércoles, 14 de septiembre de 2022 en la Sala Miguel de la Madrid, la hija del muralista y presidenta de la Fundación Desiderio Hernández Xochitiotzin, Citlalli H. Xochitiotzin Ortega, hizo énfasis en la importancia de la obra de su padre como un vínculo entre dos épocas del arte en México: “Mi padre cumple 100 años de vida, tenía 19 años cuando convivía con el Doctor Atl, participaba en tertulias con Frida (Khalo), pudo llevar a Diego (Rivera) al Barrio del Artista”.

En su oportunidad, la coordinadora Nacional de Artes Visuales del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, Mariana Munguía Matute, destacó la importancia de que se reconozca la obra de Desiderio Hernández Xochitiotzin “como el último de los grandes muralistas mexicanos y como el más destacado relator de la historia de Tlaxcala, cuna de la nación mexicana y del mestizaje, quien fue además un maestro de generaciones de artistas”.

Al hacer uso de la palabra, el secretario de Cultura de Tlaxcala, Antonio Martínez Velázquez, comentó que “hay que reconocer estos 100 años del muralismo, reconocer el trabajo del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, pues ha hecho una labor muy minuciosa para ir redescubriendo a aquellos otros personajes que formaron parte de este movimiento. Ese trabajo del Inbal es fundamental porque nos permite ver el movimiento con ojos más amplios.

“Gracias a eso hoy sabemos que Xochitiotzin es uno de los grandes muralistas de México, pues su trabajo tiene características muy especiales, la temática de su pintura tiene que ver precisamente con la belleza de lo cotidiano, la belleza de lo pequeño, de lo que está en las tradiciones, en los pueblos, en las casas”.

Por su parte, el secretario de Cultura del estado de Puebla, Sergio de la Luz Vergara Berdejo, destacó la importancia que Xochitiotzin tuvo para la vida cultural de Puebla: “El maestro vivió en el Barrio del Artista, recuerdo que nos tocaba ir a ver cómo pintaba, platicábamos, y si te descuidabas te ponía en uno de los murales”.

El artista plástico, cronista e investigador Desiderio Hernández Xochitiotzin es considerado el último gran muralista mexicano y fue reconocido por el Congreso del estado de Tlaxcala con el título honorífico de Embajador de la Cultura Tlaxcalteca, por inmortalizar la cultura e historia de Tlaxcala y de México en sus obras. Su trabajo más icónico La historia de Tlaxcala y su contribución a lo mexicano se encuentra en las paredes del Palacio de Gobierno de Tlaxcala. Se conforma de más de 450 metros cuadrados de obra plástica, dividida en los bloques: Tlaxcala prehispánica, La Conquista, El siglo de oro tlaxcalteca y Del siglo de las luces al porfirismo en Tlaxcala y México.

La exposición es de acceso gratuito y estará abierta al público de martes a domingo en un horario de 11:00 a 18:00 horas en la Sala Miguel de la Madrid del Complejo Cultural Los Pinos.

Fuente: Cultura de México