DÍA MUNDIAL DEL CACAO: UN LEGADO MILENARIO QUE SIGUE LATENTE EN VERACRUZ
Nacional: CACAO / Gamaliel Velazco
Cada 7 de julio se celebra
Gamaliel Velazco
/ 2025-07-07
DÍA MUNDIAL DEL CACAO: UN LEGADO MILENARIO QUE SIGUE LATENTE EN VERACRUZ
Cada 7 de julio se celebra el Día Mundial del Cacao, una fecha dedicada a reconocer la importancia de este fruto en la historia y la cultura de diversas regiones del mundo, especialmente en América Latina y, en particular, en México.
El cacao tiene raíces profundas en el territorio mexicano, donde fue domesticado por los olmecas hace más de tres mil años. Estos antiguos habitantes de la región que hoy abarca Veracruz y Tabasco, no solo lo empleaban como alimento, sino también como elemento ritual y moneda de cambio. Posteriormente, mayas y mexicas heredaron estas costumbres, convirtiendo al cacao en un símbolo sagrado, vinculado a la fertilidad, la abundancia y el poder.
Durante la época prehispánica, el cacao era considerado alimento de dioses y formaba parte de ceremonias religiosas y rituales guerreros. Los combatientes solían beberlo antes de las batallas para obtener energía, y las semillas de cacao circulaban como moneda entre los mercados mesoamericanos.
Con la llegada de los españoles, el cacao emprendió un viaje hacia Europa, partiendo en muchas ocasiones desde el puerto de Veracruz. Esto marcó el inicio de su expansión mundial, donde evolucionó hasta convertirse en uno de los ingredientes más apreciados de la repostería y la gastronomía global.
Hoy en día, el cacao continúa siendo un símbolo de identidad en Veracruz. Municipios como Jalcomulco han logrado mantener viva su tradición mediante la producción de chocolate artesanal y bebidas como el tradicional champurrado, que sigue siendo un emblema de la cultura popular y comunitaria. Además, pequeños productores locales han impulsado la recuperación del cultivo, integrando prácticas sostenibles y revalorizando el cacao como un recurso económico y cultural.
El Día Mundial del Cacao no solo es una celebración gastronómica, sino también un recordatorio del legado mesoamericano que perdura hasta nuestros días. Veracruz, como cuna histórica del cacao, mantiene vigente este fruto que sigue siendo fuente de sabor, cultura y memoria.