(Redacción).- Imagínese usted tener una empresa con ingresos millonarios, en la que tenga que realizar poco trabajo y que no esté obligado a consumir insumos, que se pague una plantilla laboral reducida, pero se tengan miles de empleados de a gratis. Además de que cada socio comercial le3 otorgue la posibilidad de ingresos extras porque quienes quieren llevar la representación de su marca están dispuestos a pagar un precio económico arriba de cualquier franquicia internacional; y si logra el triunfo llevando su marca le dé a usted cachitos del gran presupuesto económico que recibirá.

Pues bien, eso es un PARTIDO POLÍTICO, pues recibe millonarias prerrogativas que el presidente en turno administra como quiere, opera con una planilla laboral reducida y con muchos que desde “las bases” hacen la chamba sin cobrar un salario.

Es un secreto a voces que las candidaturas se venden y que los candidatos tienen que pagar al “líder” del partido por serlo, además de que está obligado a gastar de sus propios recursos (propios o conseguidos) en la campaña, mientras el dinero destinado por los organismos electorales para ese propósito se queda atorado en el bolsillo del presidente. Además, si gana un cargo administrativo, como alcaldías en el caso del 2025, se acostumbra que les otorgue algunas plazas o jugosos contratos a quienes “lo ayudaron” desde el partido. Se trata de un sistema de negocio de puro “ganar ganar”.

Después de este preámbulo podremos entender el por qué hay en este momento en México 81 organizaciones que presentaron su solicitud ante el INE para iniciar el trámite de registro como partidos políticos nacionales, eran 89, pero 6 incumplieron con los requisitos iniciales y otras 2 se desistieron.

Después del registro siguen las acciones para lograr convertirse en partido político con derecho a prerrogativas y postulaciones en las elecciones del 2027.

Las 81 organizaciones tendrán que celebrar 20 asambleas estatales con al menos 3 mil participantes, o 200 asambleas distritales con al menos 300 personas, y presentar ante el INE el registro de al menos 256 mil 30 afiliados, equivalentes al 0.26 % del padrón electoral nacional; todo esto antes de febrero de 2026… ¡Tan fácil como quitarle un dulce a un niño!

Así que, en los próximos meses, el INE deberá verificar estos aspectos para otorgar el registro de los nuevos títulos a quienes logren cubrir todos los requisitos para ser un flamante y nuevo partido político.

¿Cuántos creen que lo logren? ¿50, 40 o acaso 10? Cualquiera que sea la cifra es ofensivo para el país y para la democracia; pero será un regalo para tantos vivales que andan sueltos.

Por si esto fuera poco, también se están cultivando partidos estatales independientes a los 81 nacionales, para ellos los requisitos están mucho más facilitos; pero bueno, eso es otra historia.