(Redacción).- Carácter y valentía fue lo que mostró Rocío Nahle durante la campaña en la que no “se quebró” a pesar de los ataques feroces por parte de sus “adversarios” políticos que se asumieron a sí mismos como “enemigos” políticos y personales, y de los múltiples medios de “comunicación” estatales y nacionales que la atacaban un día sí y el otro también; no se amilanó ante las rabiosas columnas y el odio de sus autores, no lograron doblegarla.

Hoy esa imagen de mujer de carácter se reafirma con la revelación que el presidente Andrés Manuel López Obrador hizo desde la mañanera, referente al intento de extorsión por parte de una empresa televisiva: “Ahora que pasaron las campañas, Rocío Nahle me contó de cómo fueron a extorsionarla; creo que le pedían 200 millones de pesos”, dijo, y agregó:

"La acusaron de ratera, porque no entregó los 200 millones y estoy seguro que esos 200 millones no iban para la empresa, sino para los funcionarios", denunció el presidente y detalló: "Según tenían información de corrupción en Dos Bocas y como ella estuvo como encargada de la obra y que por cierto lo hizo muy bien; incluso a su esposo (lo acusaron) de tener una residencia en Nuevo León y presentaron la escritura", "resultó que era un homónimo, un señor que se llama igual que el esposo de Rocío”.

El presidente no quiso mencionar de qué televisora se trata, pero basta ver cuál de ellas fue la más furiosa detractora en campaña para tejer hilos.

Finalmente, Nahle obtuvo en las urnas 2 millones 124 mil 214 votos y el 58% de las preferencias, por lo que será la próxima gobernadora de Veracruz; con la suficiente entereza como para no ceder a este tipo de presiones y ante otras que seguramente enfrentará y está enfrentando, porque la necedad de algunos no tiene límite.

Por otra parte, los dueños de la empresa tendrán que demostrar que los extorsionadores no fueron sus enviados, hacerlo es sencillo, solamente deben cortar algunas cabezas ¡A la calle por corruptos! No hay más.