LA RARA TEORÍA DE LOS CHEMTRAILS
Internacional: CHEMTRAILS / Gamaliel Velazco
Teoría que desafía la realidad

Gamaliel Velazco
/ 2024-03-12

Los Chemtrails: Una Teoría en Auge que Desafía la Realidad

En los cielos azules, las estelas blancas que dejan los aviones de reacción son una vista común para muchos. Pero para algunos, estas líneas no representan simples estelas de condensación, sino una conspiración aterradora que ha ganado terreno en la imaginación pública en los últimos años: los Chemtrails.

La teoría de los Chemtrails postula que estas estelas no son simplemente condensación de vapor de agua, sino productos químicos rociados por los gobiernos internacionales o entidades poderosas. Aunque la ciencia ha desacreditado esta idea, ha ganado popularidad en todo el mundo, desafiando las pruebas científicas y la lógica.

La raíz de esta teoría se remonta a 1996, con un documento de investigación de la Fuerza Aérea titulado "Weather as a Force Multiplier: Owning the weather in 2025", que delineaba un posible sistema de modificación meteorológica. Aunque la Agencia de Protección Medioambiental ha aclarado que no refleja la política actual, ha alimentado la especulación sobre las en el cielo.

La teoría de los Chemtrails es maleable, adaptándose a las creencias individuales y a las preocupaciones sociales. Algunos creen que los productos químicos buscan envenenar a la humanidad, otros afirman que son para el control mental o incluso para manipular el clima.

La desconfianza en las figuras de autoridad y la difusión de información a través de las redes sociales han contribuido al crecimiento de esta teoría. Los algoritmos de las redes sociales refuerzan las creencias individuales al mostrar información que coincide con ellas, mientras que las pruebas científicas contradictorias a menudo son ignoradas.

A pesar de la falta de evidencia, la teoría de los Chemtrails ha encontrado una base de seguidores dedicados, con un estudio que revela que al menos el 10% de los estadounidenses creen en ella completamente, y más del 30% la consideran en cierta medida verdadera.

Sin embargo, los científicos insisten en que no hay pruebas de la existencia de los Chemtrails. Investigaciones exhaustivas han desmentido la teoría, destacando la naturaleza benigna de las estelas de condensación y la imposibilidad logística de un programa de rociado a gran escala.