El maestro Alberto Cortes (+) tiene una rola muy acertada, a la letra dice: “Mi país es un país con las alas de colores, que alguno de sus pintores, a veces, pinta de gris.
Sin embargo, mi país piensa que es sólo pintura; una simple travesura de un inexperto aprendiz...
¡Qué inocente es mi país!”; la mención va al caso por lo excelente que le resultó el pretexto al alcalde de Boca del Río, Juan Manuel Unanue, quién arguyó que la esxultura de “Los Voladores” ya no la volverá a ser colocada en el sitio en donde permanecieron durante 18 años porque sale muy caro repararla; eso es un absurdo total, pues mientras el artista le cobra 10 millones por restaurarla, cualquier ingeniero le cobraría una tercera parte, pero cuando no se quieren hacer las cosas cualquier pretexto es bueno. Es más, que me disculpe pero que me perdone el artista, pero tal parece que vio la oportunidad de salir de apuros económicos o actuó en contubernio para avalar el retiro de la obra.

Pero ¿en qué sí gasta el dinero público el presidente municipal? Pues, por ejemplo: le donó de manera opaca 13 millones de pesos al elefante blanco que construyó su jefe, llamado Foro Boca; esto a pesar de que el inmueble está constituido como un organismo público descentralizado; el convenio suscrito entre las partes es ambiguo ya que sólo menciona que dicho presupuesto debe “aplicarse en el ejercicio 2022, que comprende del 1 de enero al 31 de diciembre de dicha anualidad, atendiendo a las necesidades que surjan cada mes en el recinto artístico y cultural; es decir, todo indica que se trata de un desvío de recursos disimulado.

El “Foro Boca” no había recibido recursos públicos nunca antes, sino hasta la actual administración que encabeza el alcalde Juan Manuel Unanue Abascal, a quién le duele el codo reparar un símbolo de una cultura ancestral, pero que sin dudarlo ni tantito parece que desvía recursos para el Clan, dinero que les urge ahora que les quitaron el Acuario, en donde se despachaban con la cuchara grande.

Retomar el tema del retiro de la escultura cabe en este momento porque hace unos días el Gobierno Federal abrió el recinto de los Pinos para mostrar el ritual de los Voladores, uno de los mayores valores culturales de nuestro estado, orgullo de México y patrimonio de la humanidad; pero mientras a nivel nacional y mundial el ritual es valorado, en Boca del Río el alcalde “pirruris” retira la escultura, por sus pistolas.