15 de julio / Por El Tlacuilo.- Gracias a Tik Tok nos enteramos cuánto ganan los niños sacamonedas del Malecón del puerto jarocho; el oficio muy conocido en Veracruz pero lo explicamos para quienes no han tenido la dicha de visitar ese hermoso Puerto: el sistema es sencillo, si camina usted por la zona de artesanías del Malecón encontrará un grupo de niños con improvisados shorts, renegridos y con el cabello quemado porque el sol los ha mirado demasiado; se acercarán a usted sin agobiarlo y con un envidiable entusiasmo le sugerirán que arroje usted una moneda al mar y ellos la rescatarán; si usted desconoce su pericia caerá en el reto apostando mentalmente a que no lograrán ubicarla en el agua salada y turbulenta del mar, pero no es así, bastará con que la moneda suque los aires para que dos, tres, o más chamacos se arrojen al rescate y el “más trucha” saldrá triunfante mostrándole la moneda, que antes era su y ahora es propiedad del improvisado buzo.

De acuerdo a un reportaje publicado en “Merca.2.0” existe un amplio número de niños dedicados a esa actividad, “un oficio de riesgo en el que no basta solo saber nadar y contener la respiración, sino una gran tolerancia al dolor… por estar expuestos a animales acuáticos como estrellas de mar, erizos y medusas”, además desde luego a la sal marina. El articulo refiere el Tik Tok donde un internauta entrevista a uno de estos adolescentes quién afirma que en un día “jodido” puede lograr el rescate de unos 300 a 400 pesos en monedas, trabajando 4 horas; pero en un buen día se puede llevar 800 pesos; es decir que para ganarlos tendrá que zambullirse (si se trata de monedas de 10 pesos) cerca de 80 veces de manera triunfante, más los intentos fallidos en que otros le ganen el moderno tesoro marino.

Los niños del Malecón son unos héroes para sus familias para quienes trabajan, son sanos, sin adicciones y reflejan el carácter alegre del costeño; para muchos será polémica su labor, así lo reflejan los comentarios en la página del usuario @yajupe en la que incluso muchos profesionistas se indignaron de que su salario es mucho menor a esas cantidades; pero a final de cuentas estos niños se han convertido en una tradición y un atractivo turístico en donde se ganan cada peso con esfuerzo y tenacidad, en un mar que les da la oportunidad de la supervivencia de manera honesta.

Quién escribe ha bromeado toda su vida en que de niño fue sacamonedas en el Malecón, el color oscuro y el porte costeño me ayudan a dar veracidad al invento que incluso muchos conocidos creen que es real, pero no, nunca fui sacamonedas aunque me hubiera encantado serlo porque el trabajo honesto, sea cual sea dignifica, además formar parte de una tradición de mi terruño sería un honor.