La Procuraduría del Medio Ambiente clausuró el Acuario de Veracruz debido a irregularidades en su operación; en el 2021 fue denunciado durante una conferencia de prensa del Gobernador que se estaba utilizando como “saloncito de fiestas sociales”, es decir que se realizaban fiestas al interior del Acuario, lo que pone en riesgo a las especies que ahí se resguardan.

Desde hace tiempo el lugar estaba siendo inspeccionado pero los administradores habían puesto trabas legales a través de un amparo, al parecer la negativa más importante para ser inspeccionados venía de una disputa interna en relación con quien de los “socios” tomaría el control del delfinario.
Las irregularidades actuales del Acuario van desde qué, siendo un bien del Gobierno Estatal, lo tiene en sus manos un Consejo pero lo administran particulares, quienes incluso se niegan a informar a las instancias oficiales de su operación, por lo que a final de cuentas los dueños (el Estado) terminan siendo “mirones de palo” que siempre pierden las votaciones ante el Consejo.

Aunque estas irregularidades no determinaron su cierre al público por un periodo, sí habla de fallas evidentes en su administración. El motivo llano de su clausura fue la falta de cumplimiento de las normas con que deberían estar operando para sustentabilidad de las especies; la inspección que llevó a esta determinación viene precisamente de la denuncia que se realizó el año pasado respecto a la realización de fiestas al interior y se pudo realizar gracias a que a los empresarios se les negó un segundo amparo.

El tema lo abordó el Gobernador Cuitláhuac García Jiménez en su conferencia de prensa de la mañana de hoy.