El pasado 19 de julio el presidente del comité municipal del PAN en Coatepec, Oscar Camacho Ceballos, se apersonó en las oficinas del líder estatal de ese partido, Joaquín Guzmán Avilés, para entregarle una lista de panistas que presuntamente traicionaron al blanquiazul en el pasado proceso electoral, ya que incluso algunos fueron candidatos de otros partidos.

Oscar pidió a Joaquín la expulsión de esos malos elementos y la pelota se quedó tanto en la cancha de la dirigencia estatal como de la dirigencia nacional para que sean ellos los que decidan.

Entre los panistas que se aprestan a escuchar Las Golondrinas, aunque de muy mala manera porque los están acusando de traidores, destacan los nombres de la ex regidora Jacqueline Bonilla Barradas y del exdirector de Obras Públicas Municipal, Andrés Cuevas Melo que incluso fue candidato perdedor de Movimiento Ciudadano en los comicios del pasado 6 de junio.

También están a punto de ser expulsados los hermanos Raúl, Elisa y Angélica Monge Alarcón además de Ricardo Yaravid Mora Guzmán, que se cobijó en la pasada elección con las siglas del Frente Cardenista. Un caso especial lo es Silvia Lucía Ojeda Ortiz, quien sin abandonar al PAN buscó la candidatura de Morena a la presidencia municipal de Coatepec.

La nota es que el Partido Acción Nacional ya inició el proceso de expulsión de esas personas y es muy probable que dentro de unas horas o unos días a más tardar, nos enteremos que fueron expulsadas.

Y quiérase que no uno piensa en el PRI de Veracruz, que en las elecciones del 2018 y en las pasadas del 6 de junio también fue traicionado por varios de sus militantes. Por ahí se hablaba de que Héctor Yunes y Ranulfo Márquez serían expulsados del partido, pero hasta el momento nada de nada.

Quizás la estrategia de no tomarlos en cuenta sea más eficaz que la de la confrontación directa, por el momento Hector está fuera del Congreso local y Ranulfo, una vez más, se quedó sin que le den nada por sus servicios ¡Ya para que quieren expulsarlos si se expulsaron solos!