En Juchique de Ferrer, la desesperación de los “Hermanos Reigual” va subiendo de tono; del uso de los programas públicos para tratar de ganar adeptos ahora ya pasaron a la compra directa del voto; en Redes Sociales de la región los usuarios denuncian al señor Julio Barradas de ser quién reparte el billete para que la gente vote por Daniel Portilla; quienes lo publican se muestran molestos e incluso hasta recompensa ofrecen a quién capture al mapache.

En cierta manera se entiende la desesperación de la alcaldesa y de su hermano, porque en caso de que él no sea el ganador no habrá quién le cubra las espaldas, ya que las arcas municipales difícilmente resistirán una auditoría que no sea a modo.

Sin embargo, a pesar del derroche de recursos, difícilmente Daniel, alías el Olli, llegará a la silla embrujada de la presidencia, porque la gente sabe quién es él y de que pie cojea; independientemente de que la mala fama de la desastrosa administración saliente le juega en contra; porque es sabido que pretende encubrirla ¡Ya váyanles preparando las Golondrinas!