NUNCA CUAJÓ LA FISCALÍA DE VERACRUZ
Xalapa. Ver: Cero y van tres /
Cero y van tres
Xalapa. Ver / 2021-09-27
En el caso de la Fiscalía veracruzana, se aplica perfectamente el dicho de que “nos salió peor el remedio que el mal”; pues desde su creación no hemos tenido un Fiscal real a cargo de ella; cada uno de los que han usado la silla han carecido de autonomía, siguen jugando el mismo papel que tenían los Procuradores de Justicia, pero en muchas de las ocasiones incluso los Procus´ mostraron más autonomía que los Fiscales y la Fiscala.
La era de los Procuradores se cerró con el faramalloso Amadeo Flores Espinosa; entonces comenzó la nueva época de “independencia” en la procuración de justicia y de sana distancia con el poder ejecutivo estatal; a cargo estuvo Luis Ángel Bravo Contreras, quién fue electo para estar en el cargo nueve años, lo que significa que apenas debería haber cerrado su cargo hace poco; pero no, salió huyendo desbocado en cuanto hubo cambio de Gobierno.
Luís Ángel Bravo era un personaje que gustaba (o gusta) de las bebidas alcohólicas y que la mayoría del día se la pasaba beodo, así obedecía las indicaciones de Javier Duarte. Ese gustito es parte de las pasiones de los seres humanos, por lo tanto no es reprochable; pero situar a un personaje con esas características en un cargo tan delicado es sumamente peligroso, y Duarte pagó muy caro su error.
Y si Bravo Contreras fue polémico, Jorge Winckler Ortiz lo superó por mucho, con la diferencia de que Winckler sí tenía el carácter bien puesto y a diferencia de Bravo Contreras no huyó a la primera, se echó a correr hasta que ya tuvo el agua hasta el cuello; es más, le tuvieron que dar madruguete blindando el edificio de la Fiscalía con fuerzas policiacas para no dejarlo pasar e ingresara la nueva Fiscala, Verónica Hernández Gladians, quien por cierto no ha elevado mucho el nivel de la Fiscalía.
Si alguien se fletó para que la Fiscala tomara posesión del cargo fue, Javier Gómez Cazarín, sin embargo en este momento en que tienen a Cazarín contra las cuerdas, la señora Verónica le ha dado la espalda, cosas también de la naturaleza humana.
La Fiscalía de Veracruz ha sido y sigue siendo una simulación, carece de autonomía y funciona como cualquier Procuraduría; y si Luis Ángel y Winckler se vieron mal obedeciendo la voluntad de sus gobernadores, la actual Fiscala se ve peor actuando como la empleada de un segundón.
Es difícil dar vuelta atrás a la tendencia nacional y mundial de establecer Fiscalías, debido a que en la mesa y las letras la creación de esas entidades es para dar autonomía a la procuración de justicia, pero en la práctica siguen dependiendo del poder del Estado, con el riesgo y los vicios agregados de que sucede por debajo del agua.
No todo tiempo pasado fue mejor, pero la verdad que eran mucho mejor los tiempos de los Procuradores, que en abierto tenían que obedecer al ejecutivo y que si no daban el ancho los corría, sin más preámbulos que una orden directa.