Redacción | Tlacuilo.- Sí, suena chismosón y escandaloso que quien va llegando a hacerse cargo del IMSS Bienestar en el estado estuviera involucrado en las irregularidades de la Cuenta Pública detectadas por Orfis y ASF, que hubieran sucedido cuando fue Secretario de Salud; la nota es escandalosa, amarillista y vende.

Pero quienes involucran en el tema al Doctor Ramos Alor solamente ponen en evidencia su desconocimiento, o por decir lo menos: su falta de memoria.

Se las barajeamos más despacio: la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades en la Cuenta Pública 2023 del sector salud en Veracruz; además la Contraloría General del Estado presentó una denuncia por el posible daño patrimonial por más de mil 600 millones de pesos en los servicios de salud, todo esto sucedido en la cuenta pública 2023.

La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle informó que incluso se llamará a cuentas al exsecretario de Salud y los exfuncionarios que realizaron contrataciones que son señaladas con desvíos millonarios.

Pero para desgracia de quienes difundieron el escándalo, el secretario al que se alude no es Roberto Ramos; hay que recordar que Ramos Alor dejó de ser titular de la Secretaría de Salud en el 2022. Fue el 19 de mayo del 22 cuando el entonces Gobernador Cuitláhuac García anunció que Ramos Alor, había presentado su renuncia, omitiendo los detalles del por qué; pero dijo entonces que la aceptó, y nombró a Gerardo Díaz Morales, como su relevo en el cargo.

A la salida de Ramos Alor nunca hubo señalamientos por algún mal manejo de los recursos, y se atribuyó su salida a la falta de algunos medicamentos.

En fin, hubiera sido buena nota que el recién nombrado estuviera metido en un escándalo, pero no, hay que revisar las fechas antes de elucubrar y de acusar, para no vernos mal.