IMSS UN SEGURO MÉDICO CARO Y DE MALA CALIDAD
Xalapa. Ver: Los empleados se tolera ¡¿PERO LOS MEDICOS?! /
Los empleados se tolera ¡¿PERO LOS MEDICOS?!


Xalapa. Ver / 2021-04-26

Durante el transcurso de la semana pasada, nos tocó observar dos rostros del IMSS; uno de los rostros fue el lamento de un empresario restaurantero, que está luchando y esforzándose por no cerrar su negocio que ha sido golpeado terriblemente por la pandemia; y que si bien recortó considerablemente su personal ha podido conservar una plantilla laboral discreta, pero significativa, que le cuesta uno y la mitad del otro (de los ojos) pagarles sus salarios. La queja del empresario es en el sentido de que encima de su esfuerzo por conservar las fuentes de empleo y el patrimonio de su familia, tiene que hacer un sobreesfuerzo para cubrir las elevadas cuotas del Seguro Social, que no han disminuido ni un ápice ante la crisis sanitaria, por el contrario, van en aumento: “¡Acabo de pagar cincuenta mil pesos al Seguro, y mira el poco personal que tengo, es exagerado el cobro!”, apuntaba con rostro de preocupación.

Por otra parte, nos topamos de frente con el otro rostro, al ser testigos del trato carente de ética por parte de un remedo de médico de nombre Emilio Costeño, que cobra en el IMSS como especialista en la unidad de displacía de la clínica 11 de Xalapa, pero que más bien se especializa en “cotorrear” con su “asistenta”, lo que lo distrae y preocupa más que atender adecuadamente a sus pacientes; el asunto es grave ya que el “medico” trata directamente con mujeres; varias de ellas se han sentido agredidas por el trato déspota y carente de sensibilidad; existen ya quejas documentadas en su contra y se está en espera de que las autoridades del Seguro Social determinen una postura oficial respecto al desempeño de su empleado, en el que se ejerce negligencia y violencia de género; veremos si hay disciplina o contubernio.

Mientras eso sucede los empresarios seguirán pagando altos costos por un Seguro Social que trata a sus trabajadores con la punta del pie a pesar de que se les cobra la atención por adelantado ¡Lamentable! Urge una purga.