Casualmente en el momento que Manuel Huerta Ladrón de Guevara está contra las cuerdas, su alfil en el Congreso local levanta una cortina de humo para protegerlo a través de acusaciones sin pruebas, nada nuevo para el diputado Leno Rosales Torres, porque ese es su “modus operandi.”

Leno pegó donde debía, con un escandalo de chismozón para los medios de comunicación, lo que efectivamente, ha dejado un poco de lado el delicado tema de la denuncia por violación sexual en contra de Huerta, que se ha difuminado en el ambiente local pero que en el nacional continúa ocupando las páginas y los espacios en web de los principales medios de información.

Cada vez Huerta se vuelve más insostenible en su superdelegación, debido a las múltiples denuncias por acoso sexual y de corrupción en algunas delegaciones.

Pasa el tiempo y es más incómodo al interior de su partido, porque quiere imponerse por sobre los grupos de "su" partido en el poder, moviendo a su gente en un intento desesperado por adueñarse de la presidencia de Morena Veracruz ¡Qué personaje!