Un simpatizante, escolta o quien haya sido, le propinó unos golpes a un adolescente que intentó acercarse al presidente durante su gira en Veracruz, el incidente puede sonar escandaloso y algunos se desgarraran las vestiduras por el hecho, pero a final de cuentas la chamba del ese señor es proteger al presidente, y no se va a ponerse a averiguar si quienes se arrojan de “espontáneos” a intentar romper el área de protección traen buenas o malas intenciones.

Si bien el video que circuló no muestra el momento en que fue golpeado, si se observa al adolescente sentado en el suelo llorando, más que por los golpes por la angustia de que no pudo exponer su problema ante el mandatario. Sucede que la madre del muchacho, que aparece también en el video a su lado, fue despedida del Congreso del estado por hacer olas en cuestiones relacionadas con sus prestaciones laborales; la señora Rosa Aurora Gonzales realizaba la modesta labor de intendencia en el recinto legislativo y su angustia es porque si no tiene trabajo su hijo no podrá estudiar “la prepa.”

¿Quién tomó la determinación de correr de su trabajo a esa humilde mujer? No lo sabemos; pero ahora ya es del conocimiento (si es que no lo era) de Gómez Cazarín, Domingo Bahena y de Jesús Rodríguez, tres tipos que por cierto carecen de sensibilidad y empatía, lo que ha causado distintos conflictos que han dañado la imagen tanto del Congreso como, en este caso, de una gira presidencial que trajo muchos temas positivos, pero que tuvo este prietito en el arroz gracias a que los “líderes” del Congreso hacen las cosas con las patas, con el hígado y con las vísceras; pero nunca con la cabeza.