A LOS BOLEROS, NI UN MECATE PARA QUE SE AHORQUEN
Xalapa. Ver: Imagen / El Demócrata /
¡Como a todos!


Xalapa. Ver / 2021-07-12

Ha pasado un año y tres meses desde que se implementó el famoso “Quédate en Casa” con el que no se pudo evitar la muerte (hasta este domingo) de 234 mil personas y los más de 2 millones 500 mil contagios. Y ese es el tiempo que llevan los boleros del Parque Juárez (ubicado en pleno centro de Xalapa) sin trabajar y por consiguiente sin percibir ingresos.

De los 25 boleros que antes de la pandemia trabajaban seis días a la semana, ahora sólo lo hacen diez o a veces menos, ya que el parque continúa parcialmente cerrado. “Tantito por la pandemia y tantito porque no hay dinero, la gente ya casi no se acerca por el parque y menos a bolearse los zapatos. En estos tiempos de escases económica, pagar 25 pesos por boleada es gravoso para la mayoría de los xalapeños que prefieren limpiarse los zapatos ellos mismos”, nos comentó don Francisco un bolero con más de tres lustros trabajando en el parque.

Dijo no entender cómo es que si las autoridades han permitido la apertura de cines, bares y antros no permitan que se abra en su totalidad el Parque Juárez cuando es un espacio al aire libre que se puede disfrutar llevando a cabo las debidas medidas de higiene.

“Esto nos ha espantado a la clientela. Hay días en que no llevo ni un peso a mi casa porque no hay boleadas. Antes sí salía para el gasto, pero en la actualidad no. Hay varios compañeros que ora sí que bajaron la cortina y no han regresado a bolear desde hace más de un año”, dice con desconsuelo.

La gran mayoría de los 25 boleros del parque llevan 15 o 20 años lustrando calzado, pero la pandemia se ha ensañado con ellos. Cuando se le pregunta a don Paco si han recibido apoyo del gobierno contesta con ironía: “No nos han dado ni un mecate para que nos ahorquemos”.

Triste panorama para este gremio, pero lo raro sería que los ayudaran, porque el Ayuntamiento de Xalapa a todo el sector productivo y trabajador lo ha mantenido durante la pandemia en el más completo de los abandonos.