David Velasco Chedraui como alcalde de Xalapa hizo un buen trabajo, así nada más a secas, sin destacarse por algún acierto trascendente o alguna obra magna; si lo comparamos con el trabajo de quienes ocuparon las dos administraciones posteriores, entonces Vicho sería un presidente municipal malón, pues tanto Elizabeth Morales como Américo Zúñiga lo superaron por mucho; pero si lo medimos con lo que ha realizado el actual alcalde Hipolento Rodríguez Herrero, entonces Velasco Chedraui lucirá como un portentoso estadista, pues esta administración ha sido un caos en todos sentidos.

El apunte surge por el avispero de comentarios que generó la reunión de Vicho Velasco, aspirante a candidato; con El Chapito Avilés, presidente del PAN en el estado; muchos interpretaron el encuentro como la firma del acuerdo para que el empresario Velasco sea el abanderado para representar a ese partido en las próximas contiendas por la alcaldía de Xalapa, lo que dejaría fuera a Sergio el Bailador; un nefastoide “político” que fue descrito en su momento desde su propia bancada del Congreso como un ser corrupto y adicto, dispuesto a hacer lo que fuera con tal de mantenerse en el poder; además de lo acusaron de utilizar el dinero público del Congreso para el pago de “borracheras, drogas y mujeres”.

Ya puestos los ojos en estos dos aspirantes azules, pues ojala se arregle David con el PAN, porque imagínese usted que ese partido ganara llevando de candidato a Sergio Hernández, sería la Iglesia en manos de Lutero; las arcas municipales se convertirían en botín de su grupo político y el cargo sería utilizado para fortalecer a sus patrones ¡Que dios nos agarre confesado!

Bajo esas posibilidades, ojala que David Velasco no sea Tontín y se ponga buzo caperuzo.