REPARTIDORES Y VECTORES
Xalapa. Ver: Sin ley ni orden /
Sin ley y sin orden


Xalapa. Ver / 2020-08-04

Desde que dio inicio la pandemia llamó nuestra atención que se incrementó notablemente el reparto a través de motocicletas; nos queda claro que es la manera en que muchos buscan no exponerse al contacto social con el fin de evitar el contagio del coronavirus.
Desde antes de la pandemia habíamos ya notado lo temerarios que son al circular la mayoría de los conductores de esas unidades, que con frecuencia ponen en riesgo su integridad física y la de quienes se les atraviesen en el camino.
Pero más que esos dos detalles, existe otro que preocupa; los repartidores hacen base en la calle, platican entre ellos durante largo rato sin utilizar cubrebocas; no cuentan con ninguna oficina a donde puedan asearse para desinfectarse, ni siquiera tienen a donde hacer sus necesidades fisiológicas básicas, por lo que las realizan como dios les da a entender, sin la más mínima higiene. Nunca los hemos visto usar gel antibacterial.
Paradójicamente los repartidores son individuos con alto riesgo de contagio, pero la gente considera que utilizando su servicio se protegen del Covid-19 ¡Nada más alejado que eso!

UBER EATS; NULAS MEDIDAS DE HIGIENE
Bastó subir a Twitter (@eltlacuilo) una fotografía del hacinamiento de los repartidores motorizados que se aglutinan en la calle de Fresnos en las Ánimas, para que los usuarios de la Red les pusieran nombre y apellido, además de aportar algunos datos.
Sucede que la “empresa” más fuerte que brinda ese servicio se llama Uber Eats; entrecomillamos empresa porque como dijimos en líneas anteriores no tienen oficinas y dudamos que a sus trabajadores les otorguen seguridad social.
Dos usuarios señalaron que la dichosa empresa está sangrando a los restauranteros, cobrándoles hasta un 30% de comisión por realizar las entregas de sus productos, lo que, como bien lo señalan usuarios de Twitter, está dejándole a las empresas con un margen mínimo de utilidades. A río revuelto ganancia de pescadores, o de tiburones, como es este caso.
Denunciaron también que en algunos otros puntos de la ciudad sucede lo mismo, los repartidores socializan sin las normas mínimas de higiene preventiva; se reúnen en la calle de Enríquez en las bancas frente a Contino, en Diego Leño esquina con Murillo Vidal y en la calle de Rojas; pero suponemos que debe haber otros puntos en donde “hacen base”. Bien lo comentó @Loeza_te; esos repartidores nos están llevando “Covid-19 a domicilio” ¡Aguas!

COMERCIO AMBULANTE EN DOS RUEDAS
Los repartidores en motocicleta son ya una plaga, que por ser una nueva modalidad operan sin ningún protocolo, y si habiendo leyes que rijan a otros prestadores de servicio les cuesta trabajo ajustarse a ellas; quienes no tienen reglamento maniobran con manga ancha para llevar a cabo todas las barbaridades posibles.
Es recurrente que los “motonetos”, que reparten desde tortillas hasta platillos gourmet, recorran las calles a exceso de velocidad, sin respetar carriles y rebasando por la derecha; la gran mayoría no traen equipo de protección contra accidentes, a lo más que llegan es a usar casco; en resumen, si no existe una ley que los regule están operando de manera anómalo (válgame la rebuznancia); es un “servicio” que está al mismo nivel que el ambulantaje, con la diferencia de que los Uber Eats y sus imitadores representan mayores riesgos que los comerciantes informales.