LOS DOS POLICÍAS QUE NO DEBERÍAN HABER MUERTO
Córdoba, Ver.: Torres inservibles /
Venenotas/Por El Tlacuilo


Córdoba, Ver. / 2020-02-24

LETICÍA PILATOS
Sorprendió un comunicado en hoja membretado del Ayuntamiento de Córdoba lanzado a escasas horas de los hechos violentos que cobraron la vida de cuatro policías en ese municipio.
En el contenido del texto, que no fue desmentido por las autoridades municipales y que fue validado como autentico por los medios de comunicación de la zona, las autoridades municipales se lavaron las manos ante los acontecimientos; además de hacer un “enérgico” llamado tanto al Gobernador como al Secretario de Seguridad Publica.
De paso autocalificaron a su policía municipal como “puntual y efectiva”, dando a entender que toda la responsabilidad debería recaer sobre el Gobierno de Cuitláhuac García.
El texto pareció fuera de tiempos y de formas, la premura con que se lanzó parecía de primer momento fuera de lógica; sin embargo poco a poco la información nos fue mostrando su razón de ser; la alcaldesa se amarraba el dedo antes de la cortada.
Se fueron dando a conocer los detalles técnicos de la torre de vigilancia móvil en que fueron ejecutados dos elementos de la policía municipal; lo más impactante de esa información es que los módulos no estaban blindadas.

LA TORRE DE PAPEL DE CÓRDOBA
Meses antes la alcaldesa de Córdoba, Leticia López Landero, había puesto en funcionamiento con bombo y platillo las dos torres; ella misma informó que la inversión en cada una de ellas fue superior a los tres millones y medio de pesos.
Aunque en su momento no se dio información de las características del material con el que fueron construidas, el nombre del programa: “Córdoba blindado”, su costo y el uso para el que serían destinadas las unidades móviles, hacían suponer que estaban construidas precisamente con material blindado, pero no, son de simple y llana fibra de vidrio, motivo por el que los vigilantes de la torre quedaron totalmente desprotegidos ante las balas de los criminales; pues estaban expuestos en una ubicación muy visible, encerrados y sin la menor protección ¡Se los pusieron! Involuntariamente suponemos, pero así fue.

EL QUE NO TRANZA NO AVANZA
Tras los hechos; policías municipales demostraron abiertamente su repudio hacía su alcaldesa.
Con el paso de las horas han ido saliendo nuevos datos, que de ser ciertos mostrarían una crueldad y corrupción criminal.
Se ha dicho que las Torres de Vigilancia son “hechizas” y que se fabricaron en un taller clandestino de la misma ciudad; además de que el encargado de su adquisición fue el esposo de Leticia López; además se afirma desde hace meses que se facturaron a nombre de una empresa fantasma.
De ser confirmados los datos, estaríamos ante un acto de corrupción grave; que situaría a la ciudad muy lejos del reconocimiento que le fue otorgado por parte del Gobierno del Estado por ser una “ciudad segura”.
Ojala y no sean ciertos los señalamientos, porque si algo se requiere en estos momentos es que las autoridades municipales y estatales trabajen unidas, sin fracturas. Pero si resulta cierto, doña Leticia López estaría metida en un grave problema.

MUY ENGALLADOS
Los hechos violentos del crimen organizado en Córdoba, no fueron aislados; se dieron de manera paralela con una emboscada por la madrugada a una patrulla en Tezonapa. En la ciudad de Huatusco habían sido baleadas las instalaciones de la Fuerza Civil. Estos hechos y los de Córdoba denotan un claro reto de los malandros a las fuerzas del orden, afortunadamente en todos los casos hubo delincuentes abatidos y detenidos, lo que podría llevar al esclarecimiento de los hechos y a la ubicación de los autores intelectuales; de no suceder así, sembrarían más miedo y desconcierto en la población; que seguramente infundir terror es una de las intenciones de los malandros al mostrarse de manera tan violenta.

IGUALITO QUE LAS CÁMARAS DEL MINIGOBIERNO
En teoría las mentadas “torres de vigilancia móviles” son una fregonería, cómo su nombre lo indica pueden ser ubicadas en cualquier punto de la ciudad, de acuerdo a un estudio previo de las zonas de mayor índice delictivo.
Están equipadas con cámaras de vigilancia con capacidad de grabación hasta por treinta horas, reflector de largo alcance y acceso a bancos de información vía Internet, con lo que es posible detectar autos robados; eso es la teoría, porque en la práctica, el día que fueron mostradas ante el Cabildo no lograron conectarlas a la Red, con lo que quedaron reducidas durante su “presentación en sociedad” a simples casetas de vigilancia.
Ahora sucedió lo más terrible, las multireferidas torres de “Córdoba blindada” no lograron detener las balas de los sicarios, con los nefastos resultados ya comentados.

ERAN DE PURO AGARRA TONTEJOS
Ante las evidencias, a José de Jesús Wong Ramos, enlace entre el Mando Único y el ayuntamiento de Córdoba, no le quedó más remedio que admitir que las torres “no están diseñadas para eventos de alto impacto”; aclara que son “disuasivas y preventivas”; es decir, tienen la misma función que tendría cualquier módulo de vigilancia o patrulla equipados, que no rebasan el millón de pesos en precio, cantidad que es menos de la tercera parte de lo que costaron esos elefantes blancos, que por lo visto solamente sirvieron de escenografía y para que alguien hiciera un jugoso negocio.
Ya están auditando la adquisición de las torres; al gasto de más de siete millones de la compra, tendrán que sumarle auditar también el de la reparación que se les hizo en el mes de diciembre, pues supuestamente les falló el sistema hidráulico a ambas y las ingresaron a taller ¿Cuánto costó la reparación? Lo ignoramos, pero seguramente también hubo sobreprecio… ¡Ver para creer!