VENENOTAS Por El Tlacuilo

2019-05-15
“DESPUÉS DEL PODER, NADA HAY TAN EXCELSO COMO SABER TENER DOMINIO DE SU USO”.
(Jean Paul Richter)

Puede resultar más complejo mantener el poder que llegar él.
Al mando se puede llegar por mera casualidad, por una curva del destino, por tener un amigo que se encumbra o sencillamente por un golpe de suerte; sin embargo ya al enfrentarse cara a cara con ese monstruo impacta y en ocasiones anula la capacidad de dominarlo así que se escapa, con el consecuente peligro que esto conlleva.
La continuidad es el premio de quienes dominan el arte del poder.
Un ejemplo de esto es Javier Duarte que conservó el control de la política estatal y de las elecciones durante sus primeros años, sin embargo el último y más importante proceso electoral lo enfrentó mermado, lo que provocó que no lograra la ansiada continuidad partidista.

EL PODER NO CORROMPE; EL PODER DESENMASCARA. (Rubén Blades)

Si existe un partido político al que no se le da (ni a él ni a sus militantes encumbrados) la continuidad, es al Partido Acción Nacional.
El panista le da el mismo tratamiento a los carguitos más pinchirrientos que a los más encumbrados.
El funcionario promedio de ese partido llega al cargo, se encierra, saca el mayor beneficio de su posición de privilegio, sabedor de que después de eso difícilmente encontrará otra oportunidad. Por eso los personajes de Acción Nacional que procuran la inclusión y buscan su permanencia dentro de la política son garbanzos de a libra; nos referimos a quienes lo construyen con su esfuerzo y no siendo lambiscones abyectos de alguien.
Entre los “garbanzos” destacables podríamos citar a algunos, como el caso de Julen Rementería, Enrique Cambranis y Joaquín Guzmán; todos ellos embarcados en el mismo proyecto.
Entre la camada Legislativa actual de reelectos no hay nada que rescatar, pues aunque hace unos días la diputada “maravilla” defendió su reelección como un mérito personal, la realidad es que el triunfo en las urnas se lo deben a su patrón, y a las fuertes sumas de dinero que se les permitió succionar de las arcas de la pasada Legislatura.

LA PASIÓN DE DOMINAR ES LA MÁS TERRIBLE DE TODAS LAS ENFERMEDADES DEL ESPÍRITU HUMANO.
(Voltaire)

El pasado Gobernador, único que ha llegado a tan alta posición bajo las siglas del PAN, fue acogido y contaminado de la naturaleza blanquizul; lo que le impidió en parte amarrar su tacita reelección a través de su hijo.
La realidad es que pudo haberlo logrado “caminando” a pesar del efecto Peje; pero en lugar de sumar sectores se dedicó a castigar y a alejar a todos ¿por qué? Solamente él y dios saben.
Pero no lo hizo solo, le ayudaron cada uno de sus secretarios y colaboradores que fieles a su naturaleza panista se dedicaron a hacer los más negocios posibles, sabedores que esto era una oportunidad de escasos dos años. De los perredistas ya ni que decir.
Todos y cada uno de ellos etiquetaron a la prensa como su enemiga sin importarle que tan raspado saliera su jefe.
Les valió tanto el futuro que ni tan siquiera utilizaron la mezquina práctica de invitar a alguien a comer en un restaurante de medio pelo para ganarse con dos tacos y una horchata su gratitud eterna y su alianza permanente (los panistas saben de qué hablamos).

UNO PUEDE APOYARSE SOBRE SU PUESTO, PERO NO SENTARSE EN ÉL.
(Erich Kastner)

Morena aún no pasa el crisol de una elección siendo poder; no podemos aún saber si saben o no permanecer en él; sin embargo sí existen focos de alerta cuando casi nadie se la rifa por su líder y por el contrario, emiten comprometedoras declaraciones y realizan acciones que marginan a los sectores sociales y productivos del estado.
A menos de un mes de conmemorar el día de la Libertad de Expresión no se ha definido aún la política de Comunicación Social, porque elaborar boletines no lo es, eso lo hace hasta el más humilde reportero.
Lo mismo sucede con otros sectores. Quizás se esté aplicando la lógica administrativa de que seis meses frente a seis años no afectan; sin embargo ya dentro de los procesos electorales no son meses los que hacen falta para cambiar una percepción negativa; hay elecciones que se pierden porque faltaron escasas horas para terminar de cerrar la estrategia que reviertan el daño que se construyó con negligencias.
Existen personajes sumados al nuevo gobierno que bien pueden aportar su experiencia política para equilibrar percepción, ahí tenemos a Ricardo Ahued y Rafael Hernández, que si bien no coincidimos, sí se les reconoce oficio.
Incluso desde la aldea está el gran Manuel Pozos, un político completo; y ahora también ya con comunicación con un hábil Edel Álvarez, por citar algunos.

NO TENGAMOS ENVIDIA DE LOS QUE ESTÁN ENCARAMADOS, PORQUE LO QUE NOS PARECE ALTURA ES DESPEÑADERO.
(Séneca)

Nunca la frase de Amado Nervo de “soy el arquitecto de mi propio destino” encontró un lugar mejor para aplicarse que en el PRI;
que aunque lentamente pero de manera sistemática fueron labrando su caída tanto en el estado como en el país, y por lo visto aún no terminan de hacerlo, pues su obcecación por hacerse daño entre sí raya en lo compulsivo.
El actuar de soberbia de los gobernantes y funcionarios del PRI ya era evidente desde hacía muchos años, lo único que se necesitaba para su caída era que surgieran personajes capaces de capitalizarlo.
El PRI Veracruz aún cuenta con un capital político importante que debe por lo menos conservar y en el mejor de los casos incrementar.
Desde el Congreso tienen voces autorizadas como la de Moreno Salinas y aunque poli contundida a Erika Ayala.
Marlón Ramírez tendrá que agrupar a sus alcaldes, a sus regidores y a sus legisladores estatales y federales; para eso tendrá que sumar antes un equipo con capacidad ayudarlo a subir; el PRI ya tocó fondo, ya no podría irse más abajo, a menos de que persistan en su idea de autodestruirse.

MANDANDO MAL SE PIERDE LA AUTORIDAD DEL MANDO. (Publio Siro)

Queda claro que el mayor reto para los hombres del poder del momento será la permanencia.
Para que no vayan a ignorar la importancia de conservarlo deberán a voltear a ver hasta donde cayeron los encumbrados de los dos poderes recientemente pasados.
Quién sabe del servicio público a la mexicana debe ser consiente que con ganas de fregar, en cualquier oficina pública pueden ser encontradas irregularidades; y que la única forma de “ampararse” es seguir ostentando algún tipo de poder.
Así que si pierden continuidad son muchos los riesgos, y si permiten que sus líderes políticos la pierdan, el riesgo será aún mayor.