¡LA URGENCIA!

2018-10-11

¡LA URGENCIA!
A todos nos ha pasado que nos agarra la urgencia de ir al sanitario en plena calle. Corremos a la gasolinera pero la puerta está cerrada con llave; pensamos ir a la plaza comercial más cercana y la vemos demasiado lejos: “¡No llego!” pensamos para nuestros adentros.
Dando pasitos sin apoyar demasiado el pie (porque la resonancia la sentimos en la vejiga) nos enfilamos hacía cualquier fonda, restaurante o cantina que esté a la mano, solamente para chocar con el consabido letrero de “el baño es sólo para clientes”. En la desesperación quisiéramos encontrar cualquier lote baldío o calle solitaria para acabar con el sufrimiento.
A veces hasta le hemos suplicado al dueño del baño: “¡Por favor, una micción no se le niega a nadie!”, pero nada, nadie se conduele de nosotros.
Así andaba el señor alcalde Hipólito Rodríguez con su urgencia de tirar la basura en algún lado; hasta que le prometieron abrirle el Tronconal.