De Polis

2017-12-15
De Polis
De risa la intervención de la policía de Irapuato durante el rodaje de una película de acción en el Centro de esa ciudad. Pensaron que el asalto a una joyería que estaban filmando era un atraco real y golpearon a cuatro actores, los despojaron de sus armas de salva, y los esposaron. No entendieron que era una grabación hasta que la directora gritó: “¡corte!”. El ridículo fue mayúsculo y una de dos, o esos artistas merecen el Oscar por su extraordinaria actuación, o los policías necesitan lentes y algunas neuronas extras. En lo personal ya encendí una veladora de gratitud a San Dieguito porque el acontecimiento no sucedió en Veracruz. Una que no nos tocó ¡Bendito dios!