ANTES ERAN “CHORIZOS”, AHORA “FAKE NEWS”
ANTES ERAN “CHORIZOS”, AHORA “FAKE NEWS”
2019-02-25
VENENOTAS

Por El Tlacuilo

ANTES ERAN “CHORIZOS”, AHORA “FAKE NEWS”

DE LOS OCHENTAS PA´ACA
En aquellos tiempos en que las credenciales de prensa se imprimían en latón y eran poderosas “charolas”; cuando a los aprendices nos tocaba ir por los boletines impresos, recorriendo los edificios de las dependencias de gobierno.
Durante esa época, antes del Internet, que parecería que hoy significa la prehistoria; a las noticias falsas (en ciudad de México al menos) se les llamaban “chorizos”, ahora el equivalente sería una “fake news”.
Se trata de información falsa que se pretende hacer pasar como real. No es la noticia de los Portales de humor (Deforma, ProcesoMX etc.) que hacen evidente que su contenido es ficticio; tampoco se trata de la información que se deja en claro que no está confirmada; sino de la que se difunde con una intención directa de crear desinformación.
La nota falsa es la herramienta que los medios de comunicación con poca ética utilizan para generar desinformación; son lanzadas con “la intención deliberada de engañar, inducir al error, manipular, desprestigiar o enaltecer a una institución, entidad o persona”.
Regularmente la falsa información es utilizada para obtener ganancias económicas o raja política, ya sea por parte de los calumniados o de quienes les interesa el falso prestigio personal o desprestigio de sus adversarios, y pagan por ello.
Si bien en los medios de comunicación a veces existen los “chorizos”, en las Redes Sociales son el pan nuestro de cada día. Para acabarla de amolar, encuentran un público fértil, pues en su gran mayoría quienes más las leen (y las creen) son los nuevos usuarios, que no analizan el contexto de los contenidos, ni la fuente de donde provienen.

CLÁSICAS
En los fake news existen ya algunos clásicos, como el de que comunica que a partir de tal o cual fecha los correos y Redes Sociales empezaran a cobrar por su uso; o el otro que aunque macabro es frecuente, el de la famosa camioneta blanca que anda robando niños (debe ser omnipresente porque la ven en todo el país)
Recientemente la mentira de moda es que van por las calles mujeres vistiendo ropa con logotipo del INE, se presentan en los domicilios “para censar”, pero cuando les abren la puerta aparecen dos o tres hombres y se meten a asaltar la casa. A esa versión le cambian solamente el nombre de la ciudad en donde –según ellos- sucede, pero es acompañada por las mismas fotografías.
Otra información falsa, bastante grotesca que reaparece periódicamente en las Redes, es que fueron encontrados los cadáveres de 72 niños en playas veracruzanas; para hacer más atemorizante la “noticia”, apuntan que les fueron extraídos órganos de su cuerpo. La “nota” se acompaña con fotografías de cadáveres en una playa.
Las imágenes son reales, pero la información no; las fotos corresponden a la de familias de migrantes que provenían de Medio Oriente y África, e intentaban llegar a Europa. Su embarcación naufragó cerca de la costa de Libia.
Antes se había difundido algo igual de perverso, imágenes de un supuesto hallazgo en Veracruz de cuerpos de varios niños dentro de contenedores con hielo; las fotos en esa ocasión correspondieron a las víctimas de un ataque en Gaza en 2014.
¿Escalofriante verdad? hasta donde se es capaz de llegar.
Pero imagínese usted, si las fake news que firma algún medio de comunicación bien identificado carecen de moral, las anónimas con mayor razón.

CHECAR NO VA DE MÁS
Actualmente el la falsa información es una herramienta muy utilizada por algunos medios de “comunicación”, para crear una percepción negativa hacia un personaje o institución.
Sin embargo no todas las maneras de desinformar se dan de forma directa, también están las cuentas de Redes Sociales falsas para “opinar” de temas o de personajes; en muchas ocasiones un solo individuo puede tener cientos de cuentas de Twitter, Facebook o de cualquier otra; y estar discutiendo, agrediendo y descalificando a cualquiera; lo hace por consigna. Eso de manera indirecta es también una manera de desinformar. Regularmente las cuentas son operadas por personas contratadas o por robots.
Lo más recomendable para detectarlas es ver su perfil, si tiene pocos seguidores y escasa información, seguramente es un “Cibernauta a sueldo”; más falso que las promesas de campaña.

CAJAS DE RESONANCIA
El cuento de “Pedro y el lobo” ilustra perfectamente la noticia falsa, pues basta con que alguien la empiece a difundir para que muchos “ingenuos” la repliquen.
Un ejemplo fresco es la licencia de tres días que solicitó Héctor Yunes; que de manera inducida o espontanea provocó que al diputado federal se le situara ya en posiciones hasta ilógicas dentro del gobierno.
Se supone que explica el librito (que dicen los maestros que se debe usar) que el protocolo que hay que seguir en estos casos es llamar al personaje para hacerle la pregunta de manera directa, y si no contesta no se difunde; pero lamentablemente ya pocas veces se hace.

SÍ REPERCUTE
En el fake news aplica perfectamente el dicho de: “calumnia que algo queda”; pues si el calumniado hace alguna aclaración, le dará más resonancia a la nota y si la mentira se descubre de manera natural, algunos no se enteraran de que era falso, mientras que algunos otros verán la verdad con suspicacia; por ejemplo, usted no lo va a creer pero en el caso de Héctor Yunes aún hay quienes comentan que “seguramente la traía amarrada, pero se le cayó”.

ENTRE LA ÉTICA Y LA VORACIDAD
La noticia falsa no tiene ninguna limitante más que la ética personal y profesional de quién la escribe o la difunde; la única censura que puede frenarla es la que haga el lector.
Si detectamos y vetamos los portales web, periódicos, espacios noticiosos o periodistas que recurren con frecuencia a la nota falsa; será la única manera de evitar caer en el engaño y la desinformación.
Cabe aclarar que una cosa es un “chorizo” y otra distinta es la especulación en torno a una información, en la especulación se diserta, mientras que en la nota falsa se engaña deliberadamente.
Desafortunadamente cada vez un sector de la prensa le tiene menos temor a difundir noticias carentes de veracidad; mientras que antes lo más importante era la credibilidad, actualmente tienen más valor “las visitas” y el escándalo que pueda generarse.
Lo escrito pretende alertar al lector, de ninguna manera es prejuzgar al gremio; porque quienes opinamos, siempre estaremos expuestos a engancharnos (sin querer o queriendo según el caso) con alguna fake news, porque en la casa del jabonero el que no cae resbala.
 
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