Rubén Salinas, candidato del PAN a la presidencia municipal de Playa Vicente, sorprendió a sus seguidores al anunciar que dejará de hacer labores proselitistas “por motivos de seguridad”. Visiblemente nervioso el joven aspirante leyó un mensaje donde manifiesta que “después de una profunda reflexión” decidió dejar para mejor ocasión su campaña.

“Lamentablemente en este momento no hay garantías de seguridad y no me permitiré exponer la integridad de quienes me acompañan. Agradezco a todos los que están y sé que seguirán estando. Hagamos de Playa Vicente un municipio próspero, como lo deseamos, como lo queremos”, dijo.

¿Quién lo amenazó? ¿Qué le dijeron? Sobre eso Rubén no dijo ni pío, pero debió ser algo lo suficientemente fuerte como para que tomara esa determinación. Una versión no confirmada dice que el candidato habría recibido amenazas directas de la delincuencia, de ahí su decisión.

Playa Vicente es un municipio que hace frontera con Oaxaca y está cerca de Acayucan, Minatitlán e incluso de Coatzacoalcos, sitios donde la delincuencia ha sentado sus reales. Y es evidente que los malosos no invitaron a comer al candidato, que decidió hacer campaña desde su casa, a control remoto, de lejitos y de manera virtual, a ver si por esos medios gana el próximo 6 de junio.