DOBLE MORAL PANISTA
Xalapa. Ver: Los abogados del diablo /
SE LA PUEDEN ECHAR ABAJO AL CONGRESO


Xalapa. Ver / 2020-07-22

SE LA PUEDEN ECHAR ABAJO AL CONGRESO
“Después me dijo un arriero, que no hay que llegar primero pero hay que saber llegar”; así sentenciaba el maestro y teólogo José Alfredo Jiménez; por hacerlo de manera contraria el Congreso veracruzano está a punto de recibir un revés del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación; dicen que dio la razón al alcalde destituido de Actopan, José Paulino Domínguez.

El Tribunal le está contando hasta 10 (días) al Congreso para que sea reinstalado; así lo afirman “el Chapito, el Chapopote y el Cachalote”.

El camino que, aseguran, lleva este alegato legal pondría en ridículo a los operadores políticos oficiales del Congreso, que ya van a la mitad del camino y aún no entenderían entonces ni la O por lo “cuadrado”.

Si llegaran a caer en desacato, quién saldría perjudicado es el experto en aplausos, Rubén Ríos Uribe, que sería castigado sin deberla ni temerla; pues como es de todos conocidos su función en el Congreso es meramente decorativa.

DOBLE MORAL PANISTA
Hay una virtud que poseen los panista, es el hecho de defender sin el menor pudor a presuntos delincuentes que militan en su partido; se plantan ante un micrófono, y sin siquiera ruborizarse esgrimen los temas legales que los favorecen, como si su defendido fuera una blanca paloma; pero ocultan los pecadillos de sus defendidos.

Es el caso del alcalde de Actopan, José Paulino Domínguez, quién según la versión azul debe ser restituido en su cargo por órdenes superiores; pero omiten que fue echado del cargo por acreditar la duda razonable de ser el responsable de delitos graves, ya que es el principal sospechoso en el asesinato de Celestino Ruiz Vázquez.

Esa doble moral con la que recurrentemente camina el PAN le ha costado el descredito de todos conocido.

Si es que en verdad le devuelven la alcaldía, se vería como un homenaje a la película “El Infierno”, en donde aparece un alcalde de ese calibre.

COJEAN DEL MISMO PIE
Es comprensible que tanto Joaquín Guzmán como Tito Delfín no tengan pudor para defender al alcalde prófugo de Actopan; si ellos mismos estuvieron en el ojo del huracán durante sus administraciones, el primero alcalde de Tantoyuca y el segundo de Tierra Blanca.

Fueron acusados de servirse con la cuchara grande y burlaron a la justicia por acuerdos políticos en lo oscurito por parte de su partido.

Del trio que está sacando la cara por Paulino Domínguez, el único que está limpio es Omar Miranda, pero porque no ha estado a donde hay; pero con esos maestrazos de la tranza ya debe estar perfectamente capacitado para el saqueo de arcas, que aplicará si logra su proyecto de ser alcalde de Xalapa; de hecho Miranda es el más beneficiado con la defensa de Paulino; pues si amarra su candidatura le hará falta “billetear” a sus operadores electorales durante campaña; y si el alcalde prófugo es agradecido seguramente le entrará a la coperacha.

TITO EL MASTER
No sería la primera vez que Tito Delfín capacita a un aspirante a presidente municipal, lo hizo muy bien con su alumnos Saúl Lara González; quién llegó a la alcaldía de Tierra Blanca (2014-2017) y es acusado de haber usado “la licuadora” para desviar recursos federales a rubros distintos del etiquetado, lo que aquí y en China constituye un delito.

Nada más que aguas, Tito cobra muy cara las asesorías, a Saúl Lara le clavó al Tesorero municipal, que, sabrá dios cuantos “reportes” le pasó a Delfín.

Pero ya que Omar decidió tener tales maestros, eso seguramente será tomado en cuenta al momento de la votación para la alcaldía, en el remoto caso de que Miranda logre ser el abanderado del PAN.