Redacción Revista el Tlacuilo.- Los invitados al Primer Informe de Gobierno de Rocío Nahle García ingresaron a Plaza Lerdo por dos accesos ubicados sobre la calle Zaragoza.

Por el filtro instalado al pie de las escaleras del Parque Juárez llegaron los invitados especiales: legisladores, representantes de partidos, funcionarios y otros perfiles de alto nivel.

Por el segundo acceso, colocado sobre la calle Carrillo Puerto, fueron llegando los alcaldes electos y munícipes en funciones. Llamó la atención la presencia de ediles de oposición que, muy mansitos, acudieron a presentar sus respetos a la Gobernadora. Se les vio hacer fila hasta que les permitieron el paso, entre ellos los munícipes salientes Patricia Lobeira y Juan Manuel Unanue Abascal, así como la presidenta entrante Josefina Gamboa Torales, además de un amplio grupo de alcaldes de todos los colores partidistas, quienes, en una dosis de humildad, acataron los protocolos de ingreso para llegar a presentarle sus respetos a la jefa del ejecutivo.

Por las escalinatas junto a Palacio subieron los Senadores Gerardo Fernández Noroña y Manuel Huerta Ladrón de Guevara, así como el coordinador de los diputados veracruzanos, Zenyazen Escobar García. Por ese mismo acceso ingresaron la Magistrada Presidenta del TSJ, Rosalba Hernández Hernández; legisladores federales y locales; así como la Fiscal saliente, Verónica Hernández Giadans; y la próxima Fiscal del Estado, Lizbeth Aurelia Jiménez Aguirre. El mensaje del relevo fue claro, especialmente por el operativo de seguridad que rodeó a Jiménez Aguirre.

Las señales del inminente cambio en la Fiscalía fueron evidentes:

El dispositivo cerrado de seguridad que protegió a Lizbeth Aurelia no corresponde al cargo de magistrada; es, más bien, el que se asignaría a una futura Fiscal.

Llegó en la misma caravana de vehículos que la actual Fiscal, quien ante la prensa se limitó a declarar: “Estoy de acuerdo con la Gobernadora y con la nueva ley”.

El evento superó con creces las expectativas y se consolidó como el acontecimiento político más significativo desde hace mucho. Los miles de asistentes, que permanecieron de pie durante horas, mostraron la empatía y cercanía social que Nahle ha logrado construir con su base de apoyo.

El respaldo de figuras políticas, incluidas voces de oposición, deja claro que Rocío Nahle mantiene un control absoluto sobre la vida pública y política de Veracruz. Llega a su primer año de Gobierno fortalecida, por encima de las campañas de odio en su contra. Hacía mucho tiempo que un gobernante veracruzano no mostraba un nivel de fuerza política tan impactante; incluso podría ser que nunca haya sucedido, al menos en la historia reciente.

Hoy fue un día redondo para Rocío Nahle, en un evento que será un referente político durante muchos años.