Redacción.– Cuando pensábamos que la Cámara de Diputados ya había tocado fondo en materia cultural, nos demuestran que siempre se puede caer más bajo: esta vez intentaron convertir el máximo recinto legislativo del país en una pista de baile al más puro estilo de los barrios capitalinos, con todo y música “sonidera”.

Así como lo lee: el próximo 7 de noviembre se tenía programado un evento de “sonideros” dentro de las instalaciones de la Cámara. Sin embargo, tras la ola de críticas provocadas por el reciente “bailongo” de la Sonora Santanera, las autoridades decidieron cancelar la celebración.

Para quien no esté familiarizado con la cultura popular de los barrios de la Ciudad de México, los “sonideros” son DJs que alcanzaron su auge entre las décadas de los ochenta y noventa. Se caracterizan por trasladarse con potentes equipos de sonido para animar fiestas callejeras con cumbia, salsa o bachata; géneros a los que en tiempos recientes han sumado reguetón, hip hop, electrónica, merengue y cha-cha-chá.

Tal vez le suene el “Sonido Pirata”, famoso por personajes como el “Medio Metro” (+), “La Cholandrina”, “El Bocho” y “El Chaputín”.

Se comenta que el evento cancelado también era impulsado por el diputado veracruzano Sergio Gutiérrez Luna, quien ha mostrado un notorio desarraigo con su estado natal incluso en medio de la tragedia. Entre sus otros proyectos figura una posible presentación de Los Ángeles Azules en el recinto legislativo, aunque no se ha confirmado si seguirá en pie.

Vale aclarar que el arte (popular o no) no tiene fronteras y que el trabajo de los sonideros es, sin duda, un oficio digno. Pero también es cierto que cada expresión tiene su espacio, y muchos opinan que la Cámara de Diputados no es precisamente el lugar adecuado para un “bailongo”.