Redacción Revista El Tlacuilo. - El embarazo en niñas y adolescentes sigue siendo un problema grave tanto en México como en Veracruz, con cifras que, si bien han registrado una ligera disminución en los últimos años, continúan siendo alarmantes, especialmente entre niñas menores de 15 años.

En el ámbito internacional, México ha enfrentado severos señalamientos ante la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) de la ONU. El organismo ha cuestionado al país por los altos índices de violencia contra las mujeres, el embarazo infantil y adolescente, el abandono escolar, la brecha salarial y los obstáculos legales en torno al aborto. La delegación mexicana, encabezada por Citlalli Hernández, defendió las acciones implementadas por el actual gobierno, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, en materia de igualdad de género. No obstante, la problemática sigue evidenciando enormes retos.

Situación nacional

Entre 2015 y 2023, la tasa de fecundidad en adolescentes de 15 a 19 años disminuyó de 72.4 a 60.3 nacimientos por cada mil adolescentes, una baja del 16 por ciento. Sin embargo, la magnitud del problema persiste: en 2021, el INEGI reportó 211 mil 081 nacimientos en menores de 20 años, de los cuales 3 mil 019 correspondieron a niñas menores de 15 años.

Para 2024, las cifras siguen siendo preocupantes: 8 mil 218 niñas de entre 10 y 14 años se convirtieron en madres, es decir, un promedio de 22 nacimientos diarios. Las causas principales siguen siendo la pobreza, la falta de educación sexual, la violencia y el limitado acceso a servicios de salud sexual y reproductiva.

Panorama en Veracruz

En Veracruz, la realidad no es distinta. Entre enero y agosto de 2017, en Xalapa se registraron 448 nacimientos en menores de edad, diez de los cuales correspondieron a niñas de 14 años y 60 a adolescentes de 15. Entre 2017 y 2023, más de 104 mil adolescentes veracruzanas, de entre 10 y 19 años, se convirtieron en madres, en muchos casos como resultado de violencia sexual.

Durante 2024, se contabilizaron 615 embarazos en niñas y adolescentes de 10 a 14 años en el estado. Ante esta situación, la Gobernadora de Veracruz Rocío Nahle García anunció en abril de 2025 un compromiso para lograr "cero embarazos" en niñas menores de 14 años para el año 2030, enfocando sus esfuerzos en la prevención en comunidades marginadas y en la atención a la violencia sexual.

América Latina en contexto

A nivel global, las tasas de embarazo adolescente han disminuido, pero América Latina y el Caribe siguen siendo la segunda región con mayor incidencia, después de África Subsahariana.

Camino hacia la prevención

Especialistas en educación sexual señalan que la solución pasa por ampliar el acceso a la información en todas las comunidades, garantizar la disponibilidad de anticonceptivos, prevenir la violencia sexual y eliminar las barreras para que las adolescentes accedan a servicios de salud sexual sin prejuicios ni obstáculos legales.

La meta trazada en Veracruz es ambiciosa, pero su éxito dependerá del compromiso social. Esto implica romper con la normalización de la violencia sexual, denunciar a los agresores —sin importar vínculos familiares o sociales— y mantener una vigilancia permanente para proteger a las niñas y adolescentes.

La protección de las infancias requiere de acciones firmes y colectivas.