UN DÍA COMO HOY MURIÓ OCTAVIO PAZ: EL POETA QUE NUNCA DEJÓ DE ESCRIBIR CON LA MIRADA

A 27 años de su partida, su palabra sigue haciendo eco en el alma de México

Un 19 de abril, pero de 1998, Octavio Paz se despidió del mundo. Lo hizo como vivió: con una discreción elegante, dejando tras de sí un silencio lleno de palabras. Murió en la Ciudad de México, su ciudad, aquella que tantas veces pensó, escribió y caminó.

Premio Nobel de Literatura, ensayista feroz, poeta del tiempo y la identidad, Paz fue una brújula para entender lo que somos, lo que fuimos y lo que a veces no queremos ser. Su obra, traducida a más de 30 idiomas, sigue en librerías, en tesis universitarias, en las paredes de las escuelas, y en la voz de quienes leen Piedra de sol como quien reza.

A 27 años de su muerte, Octavio Paz no se ha ido. Está en los silencios que saben decir, en los muros que nos devuelven la mirada, en el pensamiento que resiste a simplificarse. Un día como hoy, México perdió a uno de sus más grandes intelectuales. Y sin embargo, sigue escribiendo desde alguna página, donde la tinta no se acaba.