El pseudoempresario, pieza clave en la campaña sucia contra Rocío Nahle García ya está siendo utilizado ahora para atacar a figuras representativas de Morena en el estado, la primera dirigida a Juan Javier Gómez Cazarín y ahora contra Eleazar Guerrero Pérez, ambos con un fuerte arraigo dentro de las filas de Morena.

En el caso de Guerrero Pérez decidió ignóralo, y lamentó la guerra sucia que ha encabezado Arturo Castagne y de la cual dijo que en Morena se dedican a trabajar y no hacer caso a mentiras, “nosotros nos hemos dedicado a trabajar, tipos como este no nos quitan el tiempo, no tengo ninguna referencia de él más que sé que es un títere”. Puntualizó.

Es claro que los mitos geniales de supuestas denuncias desde la DEA Interpol, la Liga de la Justicia y la Gestapo son solamente buscapiés buscando enganchar a los electores “ingenuos”, así como distraer a quienes deben estar concentrados y ocupados de tiempo completo en su campaña, como es el caso de Eleazar Guerrero, candidato pluri´ a diputado federal.

Lo bueno para ellos es que no se han enganchado y “ni se los topan”