27 de abril (Redacción). - ¡Ay caramba! Mientras que Rocío Nahle mencionó en repetidas ocasiones a Claudia Shenbaum, y habló de sus proyectos que realizarían en conjunto, de lo que han dialogado para lograr empatar estrategias de crecimiento como presidenta y gobernadora en caso de ganar sus elecciones; mostrando Nahle a Shenbaum como una fortaleza de su campaña y de su proyecto de Gobierno; su contraparte, José Yunes, no mencionó NI UNA SOLA OCASIÓN a la candidata a la presidencia por su coalición, Xóchitl Gálvez ¿Por qué sería?

¿No hay empatía entre ellos? ¿Piensa Yunes que le resta simpatías? ¿Será que su misoginia va también contra su propia candidata? ¿O simplemente el PRI y el PAN están juntos, pero no revueltos y Yunes Zorrilla no considera a Xóchitl su candidata? ¡Sabrá Dios, uno no sabe nunca nada! Pero lo que sí es seguro que a Xóchitl Gálvez no le va a hacer nada de gracia haber sido ignorada por el candidato de su coalición en Veracruz, porque eso, aquí y en China es un grave error político… ¡Pepeyu no es Xochilover! Nos quedó claro.

Lo que son las cosas, todo el debate Yunes quiso fracturar a Nahle con López Obrador, mientras él solo tejía su fractura con la candidata a la presidencia del país, que le guste o no, tiene la capacidad de bajarlo en este momento; y no nos referimos a quitarlo de candidato, sino de pedirle al PAN Veracruz, que lo ignore, tal como él la ignoró a ella… ¡Zu mecha!