Xalapa Ver. 13 de abril, 2024.- Después de varios sexenios que la delegación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes fue una entidad ajena a los veracruzanos; en donde cada delegado que llegó aplicó la política de “puertas cerradas y mente obtusas”; llegó Ramón Álvarez Fontán y vino a rescatar la representación del Gobierno federal en Veracruz, siguiendo la dinámica impuesta por López Obrador y Cuitláhuac García de comunicación directa con los actores políticos y sociales.

Por primera vez, desde que Felipe Calderón cambió la estructura de las delegaciones, las puertas del Delegado estuvieron abiertas para los representantes populares, empresas y organizaciones civiles; además de establecerse un verdadero puente entre el gobierno estatal y federal, que fue dando frutos con temas como las casetas de cobro, las carreteras deterioradas y la colaboración coordinada.

Ayer tristemente nos entramos de que Martín Ramón Álvarez Fontán dejó el cargo como titular del Centro de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT); lo que representará para muchos empezar nuevamente a reconstruir los puentes que ya estaban firmes; con la salvedad de que quizás quien releve no le interese reconstruirlos; es decir, a todos los que tienen que ver con SICT (que son muchos), “ahora que ya se sabían las respuestas les cambiaron las preguntas”.

Por otro lado, Álvarez Fontán dejó leer entre líneas que trae algún proyecto a desarrollar durante el siguiente año y medio, periodo de tiempo en el que vendrá la madre de todas las batallas proselitistas.

Sin duda Ramón Álvarez representa un capital político digno de aprovecharse ante esa disyuntiva; si ese proyecto es la causa de su salida es un acierto, porque su terruño es uno de los más complicados para Morena, pero después de dos periodos neopanistas podría caer ya un cambio ¡Se le desea éxito!