Una de las mujeres más activas en estos días es la alcaldesa de Veracruz, Patricia Lobeira de Yunes Márquez, que lo mismo se retrata con su cuñado el alcalde jarocho Fernando Yunes (quien la está poniendo al tiro en el manejo del municipio) que asistiendo a todo tipo de reuniones.


En días pasados estuvo en la Ciudad de México en una reunión que organizó el PAN nacional a las alcaldesas y alcaldes electos blanquiazules.

Un boletín informativo dio a conocer que Paty participó en los paneles “Gobiernos de Resultados: del municipio a la gubernatura”, “Experiencias de buen gobierno municipal desde la oposición”, “Casos de éxito en el gobierno municipal para la reelección”, así como también en la mesa redonda “Gobernanza Humanista y Políticas Públicas Municipales» y “La Victoria comienza hoy”.

Pero hablando de victorias, la señora Lobeira aún no puede cantar la suya.

Las impugnaciones hechas ante el tribunal electoral por el morenista Ricardo Exsome sobre irregularidades durante el pasado proceso electoral, podrían tumbarla de la presidencia municipal por el cúmulo de anomalías que se presentaron antes y durante la elección.

Una de ellas que está perfectamente documentada, es que Paty Lobeira habría sobrepasado y con mucho los gastos de campaña.

Si esto se comprueba, la elección tendría que anularse y repetirse nuevamente con una salvedad; Ricardo Exsome sí podrá volver a competir, no así Paty que por haber hecho trampa quedaría excluida de la contienda.

La moneda sobre la elección municipal en Veracruz sigue en el aire, aunque las posibilidades de que se anule crecen cada día más.

Y si se anula la elección, Miguel Ángel Yunes Márquez (flamante esposo de la alcaldesa electa), se quedará sin asideros de donde agarrarse en busca de su segunda oportunidad como candidato a la gubernatura de Veracruz.

Mala cosa para el Clan de El Estero.